Frases célebres

Buscar frases por:

Henry David Thoreau

Henry David Thoreau fue un escritor, poeta, filósofo y naturalista estadounidense que nació el 12 de julio de 1817 en Concord, Massachusetts.

Cursó estudios en la Universidad de Harvard y, durante algún tiempo, trabajó como profesor y tutor en Concord y en Staten Island (Nueva York).

De 1841 a 1843 vivió en la casa del ensayista y filósofo trascendentalista Ralph Waldo Emerson.

Se trasladó a una cabaña a orillas del Walden Pond, un pequeño lago situado en las afueras de su ciudad natal. Su estancia se prolongó hasta 1847.

Regresó de nuevo a la casa de Emerson, donde residió entre 1847 y 1848, y finalmente, en 1849, se mudó a Concord con sus padres y su hermana.

Dos de los numerosos volúmenes que conforman sus obras completas fueron publicados en vida del autor: “Una semana en los ríos Concord y Merrimack” (1849) y “Walden, o la vida en los bosques” (1854). Los materiales que componen el resto de los volúmenes fueron publicados póstumamente por los amigos del escritor.

Eligió ir a la cárcel, aunque solo por una noche, en lugar de pagar los impuestos a un gobierno que admitía la esclavitud y estaba envuelto en una guerra con México. Su postura quedó más clara en su ensayo más célebre, “Desobediencia civil” (1849), en el que sentó las bases teóricas de la resistencia pasiva, un método de protesta que, más adelante, adoptaría el político indio Mahatma Gandhi.

Henry David Thoreau falleció el 6 de mayo de 1862 en su ciudad natal.

Fuente: buscabiografias.com

Frases y citas de Henry David Thoreau (74)

Las matemáticas no mienten, lo que hay son muchos matemáticos mentirosos.
Lo que un hombre piensa de sí mismo, esto es lo que determina, o más bien indica, su destino.
El amor no sólo debe ser una llama, sino una luz.

Vida ciudadana: millones de seres viviendo juntos en soledad.
Hay momentos en que toda la ansiedad y el esfuerzo acumulados se sosiegan en la infinita indolencia y reposo de la naturaleza.
Si no logras convencer a una persona de lo malo que está haciendo, procura hacer entonces lo bueno. La gente cree sólo lo que ve.
Aprendí que si uno avanza confiado en la dirección de sus ensueños y acomete la vida que se ha imaginado para sí, hallará un éxito inesperado en sus horas comunes.
La riqueza superflua sólo adquiere lo superfluo. No hace falta dinero para comprar lo que el alma necesita.
La naturaleza está tan adaptada a nuestra debilidad como a nuestra fuerza.
A los hombres no les falta con qué hacer, sino algo que hacer, o más bien, algo que ser.
La sabiduría y la pureza proceden del ejercicio; la ignorancia y la sensualidad, de la pereza.
Si has construido castillos en el aire, tu trabajo no se pierde; ahora coloca las bases debajo de ellos.
No hay un instante de tregua entre la virtud y el vicio. La bondad es la única inversión que no falla.
Hay muchos que se van por las ramas, por uno que va directamente a la raíz.

Fui a los bosques porque quería vivir deliberadamente; enfrentar solo los hechos de la vida y ver si podía aprender lo que ella tenía que enseñar. Quise vivir profundamente y desechar todo aquello que no fuera vida... Para no darme cuenta, en el momento de morir, que no había vivido.
No seas simplemente bueno; se bueno por una razón.

La riqueza es la capacidad de experimentar plenamente la vida.
Los mayores valores y beneficios son los menos apreciados.
Por la mañana siempre sopla el viento y no se interrumpe el poema de la creación, pero pocos son los oídos que lo escuchan.
No permitas que tu trabajo sea tu forma de ganarte la vida, sino tu diversión.
Las cosas no cambian; cambiamos nosotros.
De qué sirve una casa sino se cuenta con un planeta tolerable donde situarla.
El más rico es aquel cuyos placeres son los más baratos.
La ley jamás hizo a los hombres un ápice más justos; y, en razón de su respeto por ellos, incluso los mejor dispuestos se convierten a diario en agentes de la injusticia.
La desobediencia es el verdadero fundamento de la libertad. Los obedientes deben ser esclavos.

El buscador de defectos los halla incluso en el paraíso.
Conforme simplifique su vida, las leyes del universo parecerán menos complicadas y la soledad ya no será soledad, ni la pobreza tal pobreza, ni la debilidad tal debilidad.
No puede haber una melancolía realmente negra para el que vive en medio de la naturaleza y goza de sus sentidos.
El trabajador realmente eficaz no es el que desarrolla una jornada repleta de tareas, sino el que pasea por su labor con un aire reposado y placentero. Y en esa jornada habrá siempre margen para la relajación.
En vez de amor, dinero o fama, dame la verdad.
¡Como si se pudiera matar el tiempo sin insultar a la eternidad!
Deja de arañar la corteza; hay fruta madura en tu frente.
La mayor parte de los hombres, incluso en este país relativamente libre, se afanan tanto en innecesarios artificios y labores absurdamente mediocres, que no les queda tiempo para recoger los mejores frutos de la vida.

Este mundo no es más que un lienzo para nuestra imaginación.
Amad vuestra vida por pobre que sea.
Una mente sencilla e independiente no se somete ante ningún príncipe.

Crea tu tienda online

Tú tienes los productos – nosotros te damos la tienda!

Descubre cómo puedes crear una tienda online para tu negocio y comenzar a vender tus productos en Internet, usando nuestro efectivo sistema sueco de eCommerce redtienda.

Crea una tienda

Aprende Más

Estar solo me parece necesario para escapar del presente, para evitarme.
Di lo que tengas que decir, no lo que deberías decir.
Es tan difícil verse a uno mismo como mirar para atrás sin volverse.
Cualquier hombre que tenga más razón que sus prójimos ya constituye una mayoría de uno.
Bajo un gobierno que encarcele a alguien injustamente, el sitio adecuado para una persona justa es también la cárcel.
Se podría definir el cielo como el lugar que los hombres evitan.
Sólo hay un remedio para el amor: amar más.
Aquél que sabe escuchar el murmullo de los ríos jamás sentirá una completa desesperación.
Nuestros inventos suelen ser bonitos juguetes que nos distraen de cosas más serias.
Creo que es saludable estar solo la mayor parte del tiempo. La compañía, incluso la mejor, se hace pronto cansina y nociva.
Los libros son la riqueza que atesora el mundo y adecuada herencia de pueblos y generaciones.

Jamás hallé compañera más sociable que la soledad.
Cuán vano es sentarse a escribir cuando aún no te has levantado para vivir.

El tiempo no es sino la corriente en la que estoy pescando.
No hay peor olor que el que despide la bondad corrompida.
El rico está siempre vendido a la institución que lo hace rico.
Nunca mires atrás, a menos que estés planeando ir en esa dirección.
La ansiedad y el esfuerzo incesante de algunos constituyen una enfermedad incurable.
He estado atento para detenerme ante el cruce de dos eternidades, el pasado y el futuro, que no es sino el momento presente, y conformarme con esa divisoria.
Los libros deben ser leídos tan reflexiva y reservadamente como han sido escritos.
Casi todas las personas viven la vida en una silenciosa desesperación.
Un hombre es rico en proporción a las cosas que puede desechar.
Hay más religión en la ciencia del hombre que ciencia en su religión.
Ningún ser humano, pasando la edad irracional de la niñez, querrá conscientemente matar a alguna criatura que mantiene su vida de la misma tierra que él.
Las fronteras no son el este o el oeste, el norte o el sur, sino allí donde el hombre se enfrenta a un hecho.
La mayor parte de los lujos, también llamados ‘comodidades de la vida’ no sólo es innecesaria, sino que se convierte en impedimento para la elevación de la humanidad.

Mantenerse a uno mismo en esta tierra no es una dificultad, sino un pasatiempo, siempre que se viva de forma sencilla y sabia.
Mi modo de vida me ofrecía al menos una ventaja sobre quienes para divertirse están obligados a mirar afuera, hacia la sociedad y el teatro, pues mi propia vida llegó a ser mi diversión y nunca dejó de aportarme cosas nuevas.
La lectura no es un arrullo lujoso en el que las facultades más nobles se duermen, sino, por el contrario, lo que nos mantiene alerta y nos exige nuestras horas más despiertas.
Nueve décimas partes de la sabiduría provienen de ser juicioso a tiempo.
Lee los buenos libros primero; lo más seguro es que no alcances a leerlos todos.
Eres más consciente que antes de lo que es importante y lo que es trivial. ¡Vale la pena esperar al futuro!
La luz que enceguece nuestros ojos es oscuridad para nosotros. Sólo alborea el día para el cual estamos despiertos. Hay aún muchos días para amanecer. El solo no es sino una estrella de la mañana.
Cada nueva generación se ríe de las modas anteriores, pero sigue religiosamente la actual.
El costo de una cosa es la cantidad de vida que hay que dar a cambio de ella, de manera inmediata o durante un periodo de tiempo.
El lago es el rasgo más bello y expresivo en un paisaje.
A cada hombre le corresponde la tarea de hacer su vida, hasta el detalle, digna de ser contemplada en su hora más elevada y crítica.
Antes gastamos en cualquier artículo de aislamiento o alimento corporal que en aquel que pueda alimentar nuestras mentes.